- Dirección: C. Puentezuelas, 34, Centro, 18002 Granada
- Teléfono: 958 26 34 08
- Web: joyeriagerardogranada.es
- Especialidad: Joyería
- Valoraciones: Joyerías Gerardo tiene 16 con una nota media de 3,8 sobre 5
- Latitud y Longitud: 371748, -3602569
Cómo llegar
Horario
- Lunes: De 10:30 a 13:30, De 17:30 a 20:30
- Martes: De 10:30 a 13:30, De 17:30 a 20:30
- Miércoles: De 10:30 a 13:30, De 17:30 a 20:30
- Jueves: De 10:30 a 13:30, De 17:30 a 20:30
- Viernes: De 10:30 a 13:30, De 17:30 a 20:30
- Sábado: De 10:30 a 13:30
- Domingo: Cerrado
Descripción
Joyerías Gerardo: joyería de calidad en el centro de Granada
Joyerías Gerardo es una joyería ubicada en pleno centro de Granada, en la calle Puentezuelas número 34. Con una valoración de 3,8 sobre 5 por parte de sus 16 clientes, es una de las joyerías más valoradas de la ciudad.
En Joyerías Gerardo encontrarás una amplia variedad de joyas de calidad, desde anillos de compromiso hasta pendientes de diamantes. Además, ofrecen servicios de reparación y limpieza de joyas, así como la posibilidad de crear joyas personalizadas a medida.
La atención al cliente es una de las principales preocupaciones de Joyerías Gerardo. Su equipo de profesionales altamente cualificados te asesorará en todo momento para que encuentres la joya perfecta para ti o para esa persona especial.
Si estás buscando una joyería de confianza en Granada, no dudes en visitar Joyerías Gerardo. Puedes contactar con ellos en el teléfono 958 26 34 08 o a través de su página web www.joyeriagerardogranada.es.
Opiniones
Alexandra M: ★☆☆☆☆
Trato al cliente nefasto, mucha soberbia y no entregan el trabajo en el día concretado, cuando vas a pagar quiere cobrarte más de lo que te dicen en la primera vez que vas.
Fer Nandaz: ★☆☆☆☆
ESTAFA! NO COMPRÉIS AQUI. Compré mis alianzas de boda, en teoría de oro blanco. Me salieron carísimas porque a la hora de pagar me dijeron que valían más de lo que me habían…
Guillermo Diaz Medina: ★☆☆☆☆
Le pregunté acerca de si le parecía una perla australiana, y la rozó con sus dientes para comprobarlo, ocasionando varios arañazos en la perla. Le dije ! pero qué hace ! Y me contestó que la pregunta debía formularla donde la compré.